La dicotomía civilización y barbarie en la Latinoaméricana

Expresiones literarias de la discusión política sobre la civilización o la barbarie en América Latina

Desde que los españoles llegaron a América se produjo un encuentro entre dos culturas cuyos desarrollos iban por caminos muy diferentes. Los españoles pronto quisieron obtener el control político y social sobre las colonias, puesto que las posibilidades de explotación económicas que les brindaba esta nueva tierra les permitían transformarse en potencia imperial. Este recorrido histórico tuvo como consecuencia un dilema que marcó el siglo XIX en Latinoamérica: la civilización o la barbarie. Como veremos esta dicotomía es engañosa pues en ella subyace que una cultura es mejor que la otra. Te invitamos a reflexionar junto a nosotros sobre este problema que atraviesa a nuestras culturas.

La génesis de la dicotomía

Los griegos fueron los primeros en usar el calificativo de «bárbaros» para referirse a los pueblos que hablaban de manera incomprensible para ellos y que vivían más allá de sus fronteras. Es esta comparación entonces lo que definirá la dicotomía civilización-barbarie, es decir, esta aparece cuando un pueblo o una cultura se considera a sí misma como «civilizada» frente a otra que por ser distinta (otras costumbres, normas sociales y leyes que organizan su vida social) se le considera como menos avanzada en su desarrollo y por lo tanto más cerca del estado «salvaje» o «bárbaro». Ahora la pregunta que queda es la siguiente: ¿Es válido o legítimo el criterio de comparación de una cultura y otra? Obviamente si nacemos en una cultura en la que está prohibido ingerir bebidas alcohólicas porque contaminan nuestro cuerpo (como es el caso de los musulmanes) nos parecerá absurdo y bastantes tontos las personas de otra cultura que sí lo hagan. Sin embargo, podemos aventurar que esto no es criterio suficiente, puesto que en temas culturales lo que es bueno para una sociedad es malo para otras y así cada una ha construido sus relaciones y sus normas de convivencia social de acuerdo a su desarrollo histórico.

La dicotomía en América Latina

Desde que los españoles arribaron a nuestro continente se produjo lo que algunos estudiosos llaman «choque de civilizaciones», esto es, el descubrimiento de un «otro» que es tan diferente a mí que me lleva a preguntarme por los fundamentos mismos de mi cultura (religión, moral, leyes, costumbres, conductas, etc.). Las consecuencias de este cuestionamiento deriva por lo general en un momento de crisis para ambas culturas, tal fue el caso de la época de la colonización de América. Por un lado, las civilizaciones autóctonas sufrieron en los años sucesivos una merma dramática de su población, la desaparición de sus lenguas producto de la imposición del español como lengua oficial del imperio, al perder la lengua y a los indios que la hablaban se perdió la posibilidad de traducir las escrituras en jeroglífico o en cuña que registraban saberes vitales para nuestra civilización (la astronomía maya, por ejemplo, que resultaba ser más exacta en su observación de los planetas que la occidental), legados de expresiones poéticas y míticas, entre otros. Por otro lado, para los colonizadores esto significó toda una revolución de su conocimiento del mundo (revolución epistemológica) especialmente la geografía y las posibilidades económicas que con esto se abrían.

Los españoles lograron imponerse por diversas razones: las armas de fuego hacían más eficiente la lucha de los españoles, el poder unificado de los reinos de España contaban con mayor contingente de soldados y armas, es decir, estaban mejor condicionados para la guerra. En otras palabras, los colonizadores ganaron para sí la etiqueta de «civilizado» debido a su superioridad militar, mientras que las sociedades autóctonas pasaron a ser consideradas como bárbaras y sus culturas atacadas.

Durante el siglo XIX los intelectuales más conservadores consideraron necesario aniquilar los rastros de «barbarie», puesto que para ellos la cultura europea era la única que nos podría llevar al desarrollo. Pese a que gracias a personajes como Bartolomé de las Casas habían instalado el debate sobre la legitimidad de la cultura indígena. No obstante, los más conservadores miraban con malos ojos la superveniencia de lo que ellos consideraban «bárbaro» y por esta razón se iniciaron algunas empresas para controlar las comunidades que aún quedaban. Por ejemplo, en Chile a mediados del siglo XIX se inició lo que se conoce como la «Pacificación de la Araucanía», que para muchos no fue más que un eufemismo (no llamar a las cosas por su nombre) de una masacre de las comunidades indígenas que habitaban el sur de Chile.

Esperamos que este contenido te permita reflexionar sobre la importancia de la diversidad cultural y los valores que defendemos y que muchas veces pueden transformarse en intolerancia hacia otras culturas.