El Teléfono

El teléfono es uno de los sistemas de comunicación más utilizados, ya que permite entablar conversaciones con personas ubicadas en cualquier sitio donde haya un aparato telefónico.

El teléfono, como casi todos los medios de comunicación, funciona en base a la electricidad. La telefonía está muy extendida en todo el mundo, desde hace unos años se introdujo el teléfono celular, que trabaja sin necesidad de cables y puede ser llevado fácilmente de un lugar a otro. Actualmente se está utilizando rayos láser para transmitir mensajes mucho más eficientemente que la telefonía actual, la cual, sin duda, se verá mejorada con el uso de esta tecnología.

Historia del teléfono

Históricamente la invención del teléfono se le ha atribuido al escocés-norteamericano Alexander Grahan Bell; no obstante, en junio de 2002, el Congreso de Estados Unidos reconoció que el teléfono fue concebido por un desconocido inmigrante italiano llamado Antonio Meucci ¿increíble verdad?.

En la resolución, el Congreso reconoció que el teletrófono Meucci (así lo bautizó él) se mostró públicamente en Nueva York en 1860, 16 años antes de que Bell lo patentara. El veredicto estadounidense también asegura que «La vida y logros de Antonio Meucci deben ser reconocidos, así como su trabajo en la invención del teléfono». Entonces habrá que comenzar a cambiar los libros de historia.

¿Pero cómo sucedió?…Bell, que hasta ahora era aclamado como uno de los principales inventores de la historia, se limitó a robar la idea cuando el italiano acudió inocentemente a la compañía en la que él trabajaba, la Western Union con los papeles del invento. Más tarde Meucci intentó negociar con la compañía, pero su escaso dominio del inglés, sus pocos recursos económicos (no pudo pagar los pocos dólares que costaba la patente) y el nulo apoyo recibido por las autoridades competentes le impidieron reclamar lo que era suyo. Beucci murió en la miseria y sin reconocimiento alguno.

Meucci nació en 1808, estudió ingeniería mecánica en Florencia, e ideó un sistema para permitir que los trabajadores del Teatro della Pergola se pudieran comunicar. En 1830 viajó a Cuba, y mientras trabajaba en métodos para curar enfermedades mediante descargas eléctricas, descubrió que la voz podía viajar mediante impulsos eléctricos a través de un cable de cobre. En 1850 viajó a Nueva York a desarrollar esta tecnología.

La historia de Bell

Bell había construido un telégrafo experimental, el cual comenzó a funcionar erróneamente debido a que una de las piezas se soltó. Este hecho le entregó a Bell una visión de cómo las voces se podrían reproducir a distancia. Con esta idea, él construyó un transmisor y un receptor, para los cuales recibió una patente el 7 de marzo de 1876.
Cuando Bell y su ayudante, Thomas A. Watson se preparaban para probar el mecanismo recién construido, a Bell se le derramó un poco de ácido en su pierna. Mientras tanto, en la otra pieza estaba Watson al lado del receptor cuando derepente escuchó claramente el primer mensaje telefónico: «Sr. Watson, ven aquí, te necesito!”

Algunas horas después de que Bell hubiera patentado su invención, otro inventor americano, Elisha Gray, entregó un documento advirtiendo a la oficina de patentes de los Estados Unidos que él, en California, había inventado el teléfono.

Hoy en día, el teléfono ha evolucionado hacia los teléfonos celulares que son capaces de funcionar en forma inalámbrica y pueden transmitir imágenes, mensajes de texto y otras funcionalidades propias de Internet. Cada vez son más pequeños y con más servicios para los usuarios.

Otros inventores, tales como Amos E. Dolbear, también hicieron demandas a la misma oficina por haber inventado el teléfono al mismo tiempo. Los pleitos fueron clasificados por varios individuos y la demanda de Bell de ser el inventor del primer teléfono tuvo que ser defendida en la corte 600 veces antes de que el Tribunal Supremo de los Estados Unidos decidiera en su favor debido a la zona horaria.

Industria telefónica actual

Después de muchas innovaciones, arreglos y recientes descubrimientos, como la fibra óptica, Internet y el teléfono celular, hoy en día, las empresas de telecomunicaciones se han ganado un puesto decisivo en la cultura y el diario vivir de todas las personas, debido mayormente a la necesidad real de «estar constantemente comunicados».

En muchos países, hasta los años ´90, el dueño de la mayoría de las compañías de teléfonos fue el gobierno de cada país. Hoy en día, muchos países están privatizando el servicio telefónico y las corporaciones más grandes están invirtiendo grandes sumas de dinero en empresas de telecomunicaciones de otros países.

Por ejemplo, en 1990, Telefónica S.A. en españa anunció la compra de la compañía de telecomunicaciones de Chile (CTC), para luego llamarse Telefónica CTC Chile, que es hoy.