Historia de Roma (Cuarta Parte)

Los Severos, Constantino y la caída de Roma.

Los Severos

A diferencia de los buenos emperadores que no habían tenido descendencia, Marco Aurelio sí tuvo un hijo, Cómodo. Cuando muere Marco Aurelio, su hijo hereda el poder.

A él le gustaba más la buena vida y las fiestas que gobernar. Sin embrago igual pudo mantener la paz con los germanos. Cuando regresó a Roma su hermana Lucilla trató de matarlo y desde ese momento en adelante, Cómodo sospechaba que lo querían matar. Fue lo mismo que le pasó a Domisiano. Cómodo también mandó a matar a varios senadores por esta razón.

Finalmente fue asesinado en el 192 por sus cernamos. Sin embargo, ellos no tenían a nadie en mente para que se hiciera cargo del Imperio. Algunos de los hombres con más poder comenzaron a auto nombrarse emperadores. La guerra civil parecía inevitable.
En 193, un africano de nombre Severo, que era general en el ejército, se convirtió en el emperador.

En el 197, y cuando Roma estaba en guerra civil, los Partos atacaron. Severo defendió Roma. Pasó cuatro años ahí hasta que se fue a invadir Inglaterra. Murió allá en el 211 y dejó el Imperio en manos de sus dos hijos, (Caracalla y Geta).

En el siglo III el Imperio Romano tuvo varios problemas. Entre ellos, que estaban siendo atacados por los Sasánida y al mismo tiempo por los Germanos. El ejército se tenía que dividir y los generales respectivos querían ser nombrados emperador. Con esto, el ejército perdió mucho tiempo peleando entre ellos y no contra los invasores. Para financiar la guerra tuvieron que aumentar los impuestos y la gente del pueblo no estaba contenta con esto, rebelándose en reiteradas ocasiones durante ese siglo.

Muchos emperadores murieron durante estos años y casi ninguno duró más de cinco años en el poder.

Constantino

La tetrarquía de los Dioceclanos funcionó bien por unos veinte años pero luego se desmoronó. En el 306 murió el emperador Constantino. La idea era que su asistente Severo lo sucediera pero también tenía un hijo que se auto nombró emperador. En ese momento estalló una gran guerra civil. Constantino (hijo) ganó y además fue él quién incorporó el Cristianismo en el Imperio.

En el 324 Constantino mató al último de los emperadores y reinó solo. En ese mismo año fundó Constantinopla (la ciudad de Constantino) en lo que hoy es Estambul.

En este periodo, los romanos continuaron peleando contra los germanos y Sasánida. En el 378 los romanos perdieron una batalla muy importante en Adrianópolis (la ciudad de Adriano) donde los Visigodos mataron al emperador de ese entonces. Los Visigodos se establecieron en el Imperio Romano.

El joven Teodosio, general del ejército en Hispania, fue elegido para suceder al anterior emperador. Teodosio hizo tratados con lo Visigodos y con los Sasánida.

En el 391 y bajo la influencia del obispo Ambrosio, Teodosio proclamó que la religión oficial del imperio era el Cristianismo y que era ilegal practicar otro tipo de culto.

Cuando murió en el 395 había dejado al Imperio con sólidas bases cristianas.

La caída de Roma

Los Germanos y Godos no se demoraron mucho en atacar al Imperio.

En enero de 409 los Alanos, Vándalos y Suevos cruzaron el Rin y entraron en Roma. No hubo suficientes tropas para detenerlos así que mientras avanzaban iban llevándose todo lo que se les antojaba.

os Visigodos entraron en Roma pero no sólo eso porque en el 410 atacaron la ciudad y la saquearon. Los romanos no lo podían creer. ¿Cómo podía ser que alguien pudiera atacar Roma, la ciudad eterna?