¿Cómo hacer un afiche publicitario?

A continuación encontrarás la manera de construir un afiche publicitario en 5 pasos. Recuerda que éste es un tipo de formato que implica un equilibrio entre imagen (signos tanto icónicos como simbólicos) y un texto generalmente apelativo (y otras veces referencial), focalizados en convencer al receptor de consumir un producto o un servicio específico.

¿Producto o servicio?

Esta es la primera parte del proceso creativo, consiste en estudiar el producto que ofrecerás a los futuros consumidores. Este proceso de estudio puede ser muy breve y lo puedes hacer personalmente o con el grupo que trabajarás.

a) Determina si aquello que ofrecerán a los futuros consumidores es un servicio o un producto específico. Por ejemplo, una agencia de turismo ofrece viajes, por lo tanto ofrecen un servicio. Por otro lado, un detergente para la ropa es un producto.

b) Rescata los beneficios del producto que ofrecerás. Focalízate exclusivamente en las cosas buenas, más allá de los juicios personales o visiones particulares que puedas tener del producto. Es te proceso se puede llevar a cabo a través de un brainstorming o lluvia de ideas.

c) Piensa en quien es el público objetivo del producto que pretender ofrecer, pues todo lo que hagas de aquí adelante tendrá que ser pensado considerando ese potencial consumidor. Es importante categorizar en edad y estrato sociocultural Recuerda hacer un registro de toda la información que vas rescatando, te será muy útil más adelante.

¿Qué imagen utilizarás?

Aquí debes tomar otra decisión, si el producto que presentarás en tu afiche no es demasiado llamativo, focalízate en el efecto que produce este producto. La mayoría de los afiches publicitarios presentan imágenes focalizadas en los efectos que producen en las personas el uso del producto o servicio: Tranquilidad, felicidad, bienestar, lujo. Los efectos siempre deben ser positivos. He aquí un ejemplo: Busca una imagen que represente el bienestar asociado al uso de éste. No te preocupes demasiado si la intención no queda demasiado clara, pues el mensaje escrito tiene la función de explicar la imagen. Preocúpate de que la imagen sea convincente y represente un momento que el receptor desearía vivir.


¿Qué texto utilizarás?

El texto que explicará la imagen debe llamar la atención del receptor. Te recomendamos que lo intenciones de cualquier de las dos maneras que están a continuación.

1. Puede ser una frase ingeniosa que esté asociada a la imagen y que además se relacione con  las características del producto (Función referencial).

2. Puede ser una frase que apele al consumidor directamente. Esta frase busca llamar la atención y hablarte directamente al potencial consumidor del producto (Función apelativa).

Utiliza fuentes llamativas

La utilización de fuentes llamativas es muy importante en un afiche publicitario. Esta decisión siempre dependerá del público objetivo del producto que pretendes ofrecer. Por ejemplo, si el público objetivo es juvenil, dependiendo del producto o servicio que ofrecerás, será más conveniente usar unas letras llamativas. Si el producto que ofrecerás está pensado para personas adultas, de un estrato sociocultural alto, lo más apropiado vendría a ser utilizar letras más parcas y una fuente menos pretenciosa. Mantén la marca del producto siempre visible. Si el afiche publicitario consigue el efecto que se pretende en el receptor, es importante que éste asocie ese efecto a la marca que aparezca en el afiche publicitario.

Evita sobrecargas

Mantén el foco en aquello que deseas resaltar. Un afiche debe estar equilibrado, tanto en imágenes como en el texto. En orden de jerarquías, lo más importante es la imagen y esta debe resaltar y ser el foco de atención, inmediatamente después viene el texto, la cual debe explicar el texto y darle el carácter ingenioso al afiche publicitario, finalmente viene el logo correspondiente a la marca del producto que estás ofreciendo. Hay ciertos afiches publicitarios que carecen de texto y que únicamente traen consigo la imagen y el logo. Este formato busca principalmente generar expectativas o asombro y pretende que el espectador llene el vacío a través de asociaciones libres. Si consigues hacer un buen afiche publicitario, intenta jugar con esta segunda modalidad que tiene un mayor nivel de complejidad.