Literatura fantástica

Aportaciones culturales de la Literatura fantástica y sus rasgos más importantes

La literatura fantástica ha sido un concepto difícil de definir. Aquí te presentaremos una precisión conceptual a partir de los rasgos fundamentales de lo que se conoce históricamente como lo fantástico diferenciándolo de lo maravilloso y lo mágico. Asimismo, repasaremos algunos de los autores más importantes del género y, a propósito de estos, el desarrollo histórico del género. Conoce junto a nosotros la historia y las características de este apasionante género histórico.

La difícil definición de lo fantástico

Para poder precisar qué obras serían parte del género fantástico debemos en primer lugar distinguir entre lo fantástico y lo maravilloso. Lo fantástico se define por un quiebre en el orden de cosas normal que tiene como consecuencia en los sujetos que lo experimentan un estado de perplejidad y de incapacidad para explicar bajo la lógica racional los acontecimientos fantásticos. Por ejemplo, estoy de vacaciones en una playa o balneario y decido junto a mi hermana ir a dar un paseo por la playa; cuando ya nos hemos alejado unos dos kilómetros y somos las únicas dos personas en toda la playa una luz celeste se posa sobre nosotras y nos apuntan con un láser, luego de un par de minutos que parecen una eternidad la luz de aleja y al hacerlo podemos distinguir una forma ovalada que se mueve por los cielos a una gran velocidad, mayor incluso que la de los aviones que conocemos. Esta escena reuniría las características de lo fantástico puesto que al orden normal (unas vacaciones en la playa con un familiar) es irrumpida por un fenómeno fantástico que no es posible explicar satisfactoriamente desde nuestro conocimiento. Por esta razón, se dice que lo fantástico implica un quiebre epistemológico (crisis de nuestro sistema de conocimiento, de lo posible y lo pensable).

Lo maravilloso, en cambio, correspondería a un normalidad que ya es de por sí completamente diferente al orden de cosas que conocemos. Por ejemplo, soy miembro de una especie inteligente parecida a los seres humanos salvo por nuestra estatura (no superamos los veinte centímetros cuando llegamos a adultos) y porque habitamos al interior de los troncos de los árboles y piloteamos pequeñas naves voladoras construidas de ramas, hojas y plumas de pájaros. En el mundo que acabo de describir nada puede ser considerado como normal respecto a la realidad que conocemos por lo que se entiende que todo lo que ocurre a esta especie de pequeños humanoides sale de los parámetros de lo conocido. En la literatura fantástica conviven lo maravilloso con lo normal, en lo maravilloso lo normal es maravilloso.
De este modo, obras como «Las crónicas de Narnia» o «El señor de los anillos» correspondería a Literatura maravillosa, mientras que «La historia sin fin» o «Cien años de soledad» serían literatura fantástica, puesto que el orden de cosas que conocemos convive con otro orden de cosas que se rige por reglas distintas y no es posible de explicar de manera lógico-racional.

Algunas obras fantásticas

La primera obra literaria de este género fue «El diablo enamorado» publicada el año 1772 por Jacques Cazotte. Con la aparición de lo fantástico se manifiesta que a pesar de vivir en una época marcada por el racionalismo y cientificismo (racionalismo moderno) la realidad mostraba de todas formas su inestabilidad y la literatura fantástica representa la certeza de que no todo es posible de ser explicado por la lógica y la demostración empírica (demostración a partir de aquello que puede ser percibido por los sentidos), puesto que dimensiones de la realidad escapan a la explicación científica, desde la fe religiosa hasta eventos paranormales. De este modo, el género de la literatura fantástica tuvo un importante componente crítico. En este sentido, algunos cuentos de Edgar Allan Poe son ejemplos paradigmáticos de este tipo de género: «El gato negro», «El cuervo» y «El corazón delator», entre otros. Estos cuentos están combinados con elementos terroríficos, puesto que aquello que irrumpe sin explicación suscitan miedo en los personajes, lo que emparenta el género de lo fantástico con la narrativa de terror.

Disfruta lo inexplicable y asombroso leyendo estos cuentos y novelas.