Los corales

Conoce más sobre los corales, su hábitat, contextura, qué comen y cómo se reproducen.

Nombre científico: Clase Anthozoa

¿Cuál es el hábitat de los corales?

Los corales son invertebrados marinos en su totalidad (no hay corales dulceacuícolas), y están distribuidos por los mares del mundo en zonas muy específicas que reunen características variadas, como determinadas concentraciones de sales disueltas, temperatura del agua y presencia de otros organismos de los cuales dependen para su alimentación. Son organismos sésiles y coloniales, por lo que se encuentran habitando formaciones calcáreas de muchos individuos denominadas arrecifes, de diversos colores y formas según la especie.

¿Cómo son físicamente los corales?

Los corales son organismos marinos invertebrados pertenecientes al grupo de los cnidarios, pero a diferencia de sus parientes evolutivos más próximos, las medusas, estos no poseen cuerpo blandos o de aspecto gelatinoso, sino que forman colonias duras y calcáreas, aunque no todas las especies poseen la capacidad de fijar sustancias calcáreas a su cuerpo. La morfología estructural base de un coral es muy similar a la de un pólipo de medusa, o a una medusa adulta fijada al sustrato por la superficie aboral (dorsal). Poseen una sustancia blanda recubierta por carbonato cálcico, llamada mesoglea, que forma el volumen del cuerpo, y en su interior se alojan los órganos viscerales, de organización muy simple. Poseen proyecciones que nacen desde la superficie oral (hacia arriba, dorsal), contraria a la base de sujeción al sustrato, las cuales son similares a los tentáculos de las medusas de vida libre (escifozoos). Al igual que todos los organismos que forman parte del grupo de los cnidarios, poseen cnidocistos, con los cuales son capaces de inocular sustancias irritantes a otros animales, a pesar de que sus conductas alimenticias por lo general no implican la caza de organismos para nutrición.

¿Qué comen los corales?

Los corales son animales que pueden filtrar medianamente el agua que rodea su hábitat, ingiriendo pequeños organismos unicelulares, pero la gran mayoría de los corales vive en simbiosis con algas unicelulares del tipo xantófilas, a partir de las cuales obtienen por medio de la fotosíntesis realizadas por estas algas, la energía necesaria para su sustento vital.

¿Cómo se reproducen los corales?

Los corales poseen ciclos reproductivos sexuales y asexuales, con varios estados. El ciclo reproductivo sexual parte por un pólipo (forma sésil, sedentaria), el cual está fijo al sustrato marino y a partir del cual se generan pequeñas larvas plánulas. Las larvas plánulas van creciendo y completando su desarrollo hasta lograr la morfología de un pólipo adulto que no fija a sustrato hasta liberar gran cantidad de gametos al agua: la fecundación es externa y alcanza una ovosición tan alta que suele “teñir” el agua marina cuando ocurre. La distribución de las colonias de corales, luego de ocurrida la fecundación suele establecer la ubicación de pólipos “macho” y “hembra” en distintas colonias, habiendo arrecifes completos especializados en un género reproductivo. En ellos tiene lugar el ciclo reproductivo sexual. El ciclo reproductivo asexual tiene lugar mediante yemación, proceso mediante el cual se generan clones del organismo a partir del cual se generó la yema de coral. La mayor tasa reproductiva dada en los corales en general es través de reproducción sexual sobre la asexual.

Generalidades

Los corales son animales que han sufrido directamente las inclemencias del cambio climático, ya que este fenómeno ha provocado el aumento gradual de la temperatura de las aguas a nivel mundial, hecho que es letal para las comunidades de corales que conforman los arrecifes: si ya el hecho de la extinción de especies de corales de manera masiva es grave, este fenómeno concatenado con la desaparición de ecosistemas marinos completos que se sustentan gracias a los arrecifes de coral es realmente nocivo y alto impacto para la biota marina. Durante mucho tiempo y dada su forma de vida sésil y aspecto, los corales fueron considerados rocas o plantas, y fue solo en el siglo XVIII que fueron constatados como animales propiamente tal al analizarse su estructura celular, mucho más semejante a la célula animal que a la vegetal.

Tabla resumen: