Salvador Dali

Salvador Dali  fue un genio que con su locura transformó el mundo de los sueños en realidades visibles por todos.

Infancia de Dali

El 11 de mayo de 1904 nació en Figueras, España, el pintor Salvador Dali. Su padre era un estricto abogado y notario, mientras que su madre era no solo muy cariñosa, sino que fue su gran apoyo como artista. Su padre, sin embargo, financió sus clases de dibujo. A los catorce años ya exponía en Barcelona. A los 16 años muere su madre, lo cual sería un duro golpe para él, pero que lo traduciría a través de su arte.

Un joven maestro

En 1922 emigró a Madrid. Llamaba la atención no solo por su largo cabello, sino que por sus primeras obras, en que experimenta con el cubismo. Ya en 1924 conoció el dadaismo, el movimiento artístico que rompía con la estética establecida. Pero Dali no era completamente rupturista, pues se observa influencia de la escuela clásica, especialmente por Rafael y Velásquez. Por cierto, su bigote es copia de uno utilizado por Velásquez.

 Incursión en el cine

En 1929 su amigo Luis Buñuel realizó el cortometraje «Un Perro Andaluz«, en que el fundido de imágenes es una colaboración de Dali. Se muestran escenas propias de los sueños, en el estilo conocido como surrealista.

Gala, su eterna Musa

En 1929 Dali concoció a una inmigrante rusa, casada, mayor que él, pero que lo enamoró de inmediato. Su nombre era Elena Ivanovna Diakonova, conocida como Gala.

Dalí y su padre se distancian definitivamente. No era aceptado por su padre por su relación con Gala, y por estar en el círculo de los artistas surrealistas. Desheradado, se instaló a vivir con Gala en Portlligat, donde con el tiempo llegarían a tener una gran mansión.

En 1934 Dali y Gala se casan por el civil y en 1958 por la Iglesia Católica.

Un maestro surrealista

En 1931 Dali pinta su obra maestra La Persistencia de la Memoria, conocido como los «Relojes Blandos«. En ella se representa el rechazo a la rigidez del tiempo. Aparecen también hormigas, sobre el reloj cerrado, indicando la destrucción hecha por la propia naturaleza.

Una disculpa surrealista

En 1934 Dali expuso en Nueva York. En una recepción de Dali y Gala aparecen disfrazados de bebe hijo de Lindbergh y de su secuestrador, hecho que indignó en Estados Unidos. Contrariamente a lo habitual Dali pidió disculpas. Después, en España, Dali debió justificarse frente a sus cada vez más cerrados compañeros surrealistas por haber pedido disculpas por un acto surrealista.

Refugiado en Estados Unidos

En 1940 Dali y Gala huyeron de la guerra quedándose por ocho años en Estados Unidos. Durante ese tiempo se dedicó a escribir, por su puesto que en el estilo surrealista. Ingresa luego a la escultura, y después a la decoración de vitrinas en una mutitienda. Esta sin embargo, modificó su diseño, por lo tanto Dali rompió el escaparate. Denunciado, fue absuelto, pues defendía sus derechos de autor.

Una vida de artista masivo

Después de la Segunda Guerra Mundial hizo ilustraciones de historia clásicas, incluso colaboró con los estudios Disney. Sus críticos lo acusaban de abandonar el arte, para pasar a los bienes de consumo.

En la España de Franco

Dali regresó a España cuando aún gobernaba Francisco Franco. Su actitud lo ligó a la dictadura franquista, sin que realmente lo fuera.

En sus últimos años experimentó con la holografía y el uso de la geometría en sus dibujos.

En la década de 1980 el Parkinson le afectó la estabilidad de su mano para pintar, y además Gala entró en una etapa senil, con poca percepción de la realidad. En 1982 el rey Juan Carlos I le dio el título de Marqués de Púbol, que significó para el monarca un obsequio: el último dibujo hecho por Dali. El 10 de junio de 1982 murió Gala, su esposa por décadas. El genio ya no tuvo deseos de vivir.

Muerte de Dali

El 23 de enero de 1989 Dali falleció en la misma ciudad en que había nacido 84 años antes.