Aspectos Culturales durante la Expansión Liberal

El agrio conflicto que enfrentó a los gobiernos liberales con la Iglesia se trasladó al campo educacional pues la introducción del currículo científico en la enseñanza escolar chilena generó la animadversión de la jerarquía eclesiástica.

Las nuevas teorías respecto al origen del hombre, especialmente las planteadas por Charles Darwin y su tesis sobre la evolución, se hallaban en franca contradicción con el dogma católico y la teoría creacionista. A ello se sumaba el hecho de que los colegios católicos debían validar a sus egresados en un examen impartido por los establecimientos del Estado chileno, lo que en la práctica generaba una serie de problemas entre las instituciones educativas.

Estos dos problemas que afectaban al incipiente sistema educacional chileno eran asuntos que caían en la jurisdicción del ministro de Justicia, Culto e Instrucción del primer periodo de gobierno de José Joaquín Pérez, el conservador Abdón Cifuentes, quién ocupaba el cargo en base al acuerdo para repartir las carteras ministeriales derivado de la Fusión Liberal-Conservadora. La primera medida controversial protagonizada por el ministro Cifuentes fue la remoción del rector del Instituto Nacional, el liberal Diego Barros Arana, por su intención de introducir reformas curriculares de corte progresista en aquel establecimiento.

Sin embargo, el hecho que detonó la crisis en el gabinete de la Fusión Liberal-Conservadora fue la decisión de Cifuentes de validar la enseñanza de los colegios confesionales al eximirlos del requisito de la evaluación estatal; esta medida tuvo amplio rechazo en los círculos de gobierno y determinó la salida de Cifuentes del gabinete del presidente Pérez.

A pesar de los problemas ideológicos y administrativos que enfrentó el naciente sistema educacional chileno en la etapa de la hegemonía liberal, gradualmente fue ampliando su cobertura debido al constante aumento del número de habitantes en edad de ingresar a la escolaridad. A esta masificación de la educación en Chile contribuyeron instituciones como la Universidad Católica, erigida en el año 1888, y la Sociedad de Instrucción Primaria; mención aparte merece la fundación del Instituto Pedagógico, al cual se le encomendó la formación de profesores de enseñanza primaria. Es preciso mencionar, además, que en el año 1877 se dictó una ley que permitió el ingreso de las mujeres a la educación superior, específicamente en la Universidad de Chile.