José María Vargas; Él presidente civil.

Considerado el primer presidente civil de Venezuela, de profesión médico, José María de los Dolores Vargas Ponce, gobernó entre los años 1835 – 1836.

José María Vargas, destacado médico cirujano, político, escritor, científico, rector de la Universidad de Caracas y principalmente catedrático, fue uno de los primeros presidentes civiles de la Historia independiente de Venezuela y el séptimo en su historia política.

Sus inicios como médico.

Nacido en La Guaira en el año 1786, hijo de José Antonio Vargas Machuca, José María Vargas Ponce se desarrolló profesionalmente como médico, al finalizar su carrera regreso a la ciudad de Cumaná, donde se incorporó al Supremo Poder Legislativo de Cumaná en el año 1811, periodo en el cual se desplegaba en Venezuela el movimiento independentista.

La caída del movimiento independentista y por ende de la Primera República Venezolana, se origina tras un fuerte terremoto que azoto a Venezuela el 26 de marzo de 1812, momento en el cual José María Vargas, colaboro en como médico en la tragedia. Posterior a esta tragedia natural José María Vargas, fue arrestado por el comandante Juan Francisco Cervériz ese mismo año, el motivo que origino la detención fue su participación anterior en el Poder Legislativo de Cumaná, sin embargo fue dejado en libertad al año siguiente 1813.

Posterior a esta detención, José María Vargas, se dirigió a Europa a perfeccionar sus conocimientos médicos ya en el viejo continente fue incorporado como miembro al Real Colegio de Cirujanos, su área de perfeccionamiento fue en cursos de química, botánica, anatomía, odontología y cirugía. A su llegada a América en el año 1819, José María Vargas se instala en la ciudad de Puerto Rico, lugar en la cual prosiguió con su destacada labor de médico.

Vargas, comienza su labor política

Durante el año 1825, José María Vargas, se estableció en Venezuela específicamente en la ciudad de Caracas donde se desempeñó como rector de la Universidad de Caracas,  a partir del año 1827 hecho que fue ordenado por el Libertador Simón Bolívar, posterior a este trabajo, el médico José María Vargas, se hizo de prestigio e incluso este mismo año fundo la Sociedad Médica de Caracas y en año de 1829 se convirtió en director de la Sociedad Económica de Amigos del País.

Gracias a su conocida labor en la Universidad de Caracas, en el año 1835 intelectuales venezolanos, ligados al mundo político, cuestionaron la participación de militares, hecho que reforzó el poder civil encabezado en ese momento por José María Vargas.

Breve periodo presidencial

Posterior al levantamiento del poder civil, el médico José María Vargas, fue electo presidente el año 1834 y ratificado por el Congreso el 06 de febrero de 1835. Sin embargo, este proceso de presidencia no tuvo gran duración principalmente debido a que el 08 de julio de 1835, estallo la denominada Revolución de las Reformas, movimiento insurreccional armado que  comenzó a organizarse posterior a la ratificación de José María Vargas, cabe señalar que este proceso origino el derrocamiento de José María Vargas.

Este proceso revolucionario, envió a José María Vargas al exilio, proceso que fue revertido por José Antonio Paéz el cual previamente había sido nombrado por José María Vargas, Jefe del Ejército. Cabe señalar que Paéz logro derrocar del poder al ejercito rebelde, luego de estos múltiples acontecimientos José María Vargas, renuncio irrevocablemente a su cargo a la presidencia asumiendo el Vicepresidente Andrés Navarrete.

Últimos años de José María Vargas

Después de su renuncia a la presidencia del Estado de Venezuela, José María Vargas, se dedicó profesionalmente a ejercer la medicina, fue nombrado posterior a su salida Presidente de la Dirección General de Instrucción Pública, cargo que presidio entre los años 1839-1852.

Entre los hechos más destacados que recuerda el pueblo venezolano, está su colaboración en la repatriación de los restos de Simón Bolívar a Venezuela en diciembre de 1842.

En 1853, enfermo gravemente motivo por el cual viajo a Estados Unidos, donde falleció en la ciudad de Nueva York el 13 de julio de 1854 a la edad de 68 años. Sus cenizas fueron ingresadas al panteón nacional el 27 de abril de 1877, donde se encuentran hasta la actualidad.