Fin de la Revolución Francesa e Imperio Napoleónico

Conoce las últimas etapas que conformaron la Revolución Francesa y la conformación del Imperio Napoleónico.

Las últimas etapas de la Revolución fueron de inestabilidad. El Terror instauró la intransigencia política que derivó en la respuesta de los moderados quienes, una vez más, fueron ineficaces en gobernar. Napoleón surge como una figura de liderazgo, quien a poco asumir, establece un gobierno autoritario.

La Época del Terror

Las ideas jacobinas se fueron posicionando entre los participantes de la Revolución.  Tras la ineficacia de la República para hacerse cargo del gobierno, se conforma el Comité de la Salvación Pública, compuesto por 12 personas. Entre sus integrantes destaca la participación de Maximilien Robespierre, quien interviene dando un golpe de estado a través del cual consigue la presidencia del comité.

Robespierre suspende la constitución e instaura el Terror. Durante este periodo se persiguió a los enemigos de la revolución y se les asesinó. Se instauró Ley de los Sospechosos, que ayudó en la persecución de quienes manifestaran alguna oposición contra lo establecido. 1794 se denomina como el año del Gran Terror por el nivel de violencia que se alcanzó, con el asesinato de miles de personas.

Sin embargo, ciertas medidas fueron tomadas. Entre ellas destacan:

  • La ley que estipulaba los precios de los artículos de primera necesidad
  • Se establece la enseñanza primaria obligatoria y gratuita
  • Se toman medidas en el área de la salud destinadas a mejorar la situación de desvalidos, ancianos y niños, asimismo, se prohibió la mendicidad.
  • Se lotearon las tierras expropiadas a los nobles para ponerlas en venta a un menor precio facilitándole el acceso a estas propiedades a personas de menores ingresos.

Directorio

Robespierre fue asesinado por sus adversarios y se puso fin al Terror. Las ideas moderadas se volvieron a poner en la palestra y el poder retornó a manos girondinas. Se instaura una república burguesa (1795 y 1799).

El poder recae en un Directorio conformado por 5 miembros quienes establecen una nueva Constitución en 1795. En ella se instaura el sufragio censitario.

Durante este periodo la inestabilidad política y la guerra continuaron. Hubo una fuerte oposición interna por parte de los jacobinos y de quienes aspiraban a restablecer la monarquía. El éxito en el exterior del ejército francés lo vuelve famoso y una de sus figuras resalta: el General Napoleón Bonaparte, quien pone fin al Directorio con un golpe de estado.

Fin de la Revolución: Imperio Napoleónico

Tras el exitoso golpe de estado de Napoleón se instaura en Francia el Consulado en 1799. En primera instancia, tres cónsules son los encargados de gobernar, siendo Napoleón el primer cónsul. En el año 1802, Napoleón se designa como único cónsul vitalicio, para luego en 1804, denominarse emperador de los franceses, título el cual ostentó hasta 1815.

El gobierno napoleónico tuvo un carácter personalista y autoritario. Napoleón concentró los tres poderes del estado estableciendo una dictadura militar que terminó por abandonar los ideales revolucionarios.

Bajo el gobierno napoleónico se establecieron medidas que buscaron modernizar Francia. Entre ellas destaca:

  • La consolidación del orden interno
  • La expansión económica de Francia. Se creó el Banco de Francia y se instituyó el franco como moneda nacional
  • Se impuso un sistema de aduanas e impuestos que terminó con el antiguo sistema de privilegios del régimen feudal

Así también, en 1804 se crea el Código Civil, que reguló las relaciones entre los individuos y de éstos con el Estado. El código civil francés estableció la igualdad ante la ley,  la libertad individual y de propiedad,  la ley matrimonio civil y se admitió el divorcio, entre otros.

Hacia 1812, el imperio de Napoleón abarcaba casi la mitad de Europa tras el éxito de las campañas bélicas en contra de otras coaliciones, sin embargo, la estabilidad dependía de ello. Tras la desastrosa campaña en Rusia de 1812 comienza la debacle que fue coronada con la derrota en Leipzig el año 1813. En 1814 Napoleón es enviado preso a la isla de Elba, y tras un intento por retornar (Gobierno de los 100 días) es finalmente derrotado en Waterloo y desterrado a Santa Elena donde muere en 1821.