La Primera Guerra Mundial

A comienzos de 1914, Europa vivía una situación muy tensa. El 28 de junio de 1914, en una calle estrecha de Sarajevo, capital de Bosnia, fue asesinado el Archiduque Francisco Fernando de Austria, de dos tiros por un estudiante bosnio, Gavrilo Princip, uno de los tres jóvenes nacionalistas bosnios que llegaron a Sarajevo con instrucciones de una organización Servia llamada la Mano Negra. Los austríacos culparon a los servios del asesinato y les declararon la guerra. En poco tiempo, casi todos los países del Viejo Continente ingresaron a la guerra, apoyando a uno o a otro de los países en conflicto.

La Triple Entente. Así se llamó a uno de los bloques que participaron en el conflicto y que estuvo formado por Francia, Inglaterra y Rusia, agregándose luego otros países, entre los que destacaron Japón, Italia y Estados Unidos a partir de 1917.

Los Imperios Centrales que enfrentaron a la Triple Entente fueron: Alemania Austria, Turquía y Bulgaria.

Durante cuatro años los países de Europa, Japón y Estados Unidos se desangraron en la guerra más violenta de la historia vivida hasta entonces.

Se le ha llamado guerra mundial porque en ella participaron muchos países de Europa, África, Asia y América. También se ha dicho que fue una guerra total ya que involucró a casi todos los habitantes de cada país combatiente.

El desarrollo de la guerra

La Primera Guerra Mundial se desarrolló en tres frentes: el occidental, el oriental y el marítimo.

El frente occidental

Los alemanes esperaban poder vencer en forma rápida a Francia por medio de una invasión. Según ellos, ésta sería una guerra relámpago.

Las cosas no sucedieron así; al comienzo los alemanes obtuvieron espectaculares victorias al invadir Bélgica. Tantos belgas y franceses, como los soldados ingleses que apoyaban a estos países, no parecían capaces de frenar a los ejércitos germanos.

Sin embargo, antes de que finalizara el año 1914, los aliados lograron recuperarse y frenar a los alemanes, iniciándose así una guerra de trincheras que se prolongó por largo tiempo. El plan alemán de una guerra rápida había fracasado.

El frente oriental

En esta zona Alemania buscaba derrotar a la poderosa Rusia. Luego de batallas extremadamente violentas, los germanos lograron algunas victorias, como cuando se apoderaron del territorio de Polonia.

Los alemanes se vieron favorecidos, puesto que Rusia no se mostró como el enemigo poderoso que se esperaba, sino como ejércitos fáciles de ser derrotados.

El frente marítimo

La marina alemana trató de establecer su dominio en los mares, con el objetivo de superar a la poderosa Inglaterra. Para lograr este objetivo contaban con los submarinos, arma de la cual no disponían los enemigos. En 1917, uno de ellos hundió el barco inglés Lusitania en el cual viajaban muchos ciudadanos norteamericanos. El pueblo de Estados Unidos, cada vez más interesado en participar en la guerra, tuvo motivo con este accidente para ingresar a la guerra en contra de Alemania.

En los años 1916 y 1917 la guerra empezó a decidirse a favor de los aliados por los siguientes motivos:

  • El ingreso de Estados Unidos, país que aportó grandes recursos humanos y materiales a los aliados.
  • Bulgaria, Turquía y Austria, aliados de Alemania, no quisieron seguir en la guerra y se retiraron, Alemania quedó sola combatiendo a Francia, Inglaterra, Estados Unidos y otros aliados. A partir de ese momento se apreció con claridad que el triunfo pertenecería a la Triple Entente.
  • En Alemania estalló un movimiento revolucionario, a situación era desesperada: la flota se subleva, la revolución estalla en Baviera. El 10 de noviembre de 1918, el emperador Guillermo II abdica y huye a Holanda. Se instaló entonces un gobierno de tipo republicano que firmó la paz.

El 11 de noviembre, los mismos alemanes firman en Francia el armisticio dictado por los vencedores. Así , en 1918, concluyó la Primera Guerra Mundial en la que Alemania fue derrotada.

Los soldados en el frente de batalla

Esta guerra fue muy dura para los soldados. Muchos de ellos murieron, fueron heridos o hechos prisioneros. Como es lógico, en los campos de batalla sufrieron mucho y tuvieron miedo de morir en el fragor de las sangrientas luchas.

El número de soldados europeos muertos llegó a los 13 millones. El país más afectado fue la derrotada Alemania, ya que murieron cerca de dos millones de sus hombres. Algo parecido sucedió con el millón setecientos mil rusos muertos. Los franceses, por su parte, perdieron un millón cuatrocientos mil hombres y los austríacos una cantidad similar. Fueron muchas las ciudades destruidas y el hambre llegó a todos los rincones del Viejo Continente.

Pero no sólo murieron europeos. Perecieron también muchos africanos y asiáticos que habían sido llevados a una guerra que no era la suya. El general alemán Paul Hindenburg recuerda que estos soldados venidos desde lejos eran especialmente violentos en las batallas: «¡ Qué dolor más horrendo cuando, luchando contra nuestros soldados, los africanos asesinaban a los indefensos, y lo que era más terrible, los martirizaban!». Él consideraba que los verdaderos culpables no eran los africanos, sino «aquellos que, para mantener la guerra, los trajeron a combatir en suelo europeo. Por millares los iban llevando a un verdadero matadero».

Las armas de la muerte

La Primera Guerra Mundial, que comenzó a la antigua, lo que significaba que los soldados combatían con un fusil en las manos, terminó como una guerra moderna en la que las ametralladoras, los tanques, los aviones y los submarinos eran más importantes que la fuerza de los hombres.

  • En tierra, las ametralladoras se convirtieron en un arma terriblemente mortífera, pero más impresionante aún fue el uso de enormes cañones capaces de disparar a una gran distancia.
  • En el aire, los aviones de combate atacaban a los ejércitos enemigos desde el cielo. En estos aeroplanos resultaba decisiva la valentía del piloto, que contaba con muy poca protección. Algunos de los héroes más famosos de esta guerra fueron los pilotos de aviones entre los que destacó el famoso Barón Rojo alemán.
  • En el mar, los submarinos se convirtieron en un arma muy peligrosa, ya que, desde la profundidad de las aguas disparaban sus temibles torpedos contra los barcos enemigos.

El tratado de Versalles

Como resultado de la Primera Guerra Mundial hubo países vencedores y vencidos. Los más importantes entre los vencedores fueron Inglaterra, Francia, Estados Unidos, Italia y Japón. Los vencidos, en cambio, fueron Alemania, Turquía y el Imperio Austro-Húngaro.

Los países vencedores, como es común en estos casos, actuaron con prepotencia y castigaron duramente a los vencidos, especialmente a Alemania, que se vio obligada a firma el Tratado de Versalles el 28 de junio de 1919.

En este tratado quedó establecido que:

  • Alemania debía entregar parte de sus territorios de Europa a los países vencedores: como por ejemplo, Alsacia y Lorena a Francia, Eupen y Malmédy a Bélgica, y Panonia y Alta Silesia a Polonia.
  • Perdía los territorios de su imperio colonial.
  • Alemania debió pagar una gran suma de dinero como indemnización a los países vencedores.
  • Por último, debía entregar la mayoría de sus barcos y mantener un ejército muy pequeño en el suelo alemán.

Como se puede ver, el castigo era demasiado grande y los alemanes se sintieron tratados de manera muy injusta.

Sociedad de las Naciones

En el año 1920 se fundó la Sociedad de las Naciones, una organización de los países de todo el mundo, encargada de evitar nuevas guerra. El principal impulsor de esta Sociedad fue W. Wilson, Presidente de Estados Unidos.

Las tareas más importantes de la Sociedad de la Naciones eran:

  • A sus oficinas en la ciudad de Ginebra irían los representantes de todos los países para cooperar con la construcción de la paz en el mundo.
  • En ella estaban representadas todas las naciones de la Tierra; grandes o pequeñas, ricas o pobres. Todas tenían el mismo poder al interior de la Sociedad, donde no se establecían diferencias.
    En 1926, Alemania se incorporó a esta Sociedad.
  • En ella se quiso establecer un sistema de diplomacia abierta para que todos los países miembros pudieran exponer libremente sus ideas sobre los diversos problemas.
  • La Sociedad de las Naciones fue la antecesora de la actual Organización de las Naciones Unidas (O.N.U.), que se encarga ahora de velar por el desarrollo de los pueblos y la paz.