Golpe de estado 1973

Chile vive su mayor quiebre político en la historia. Las fuerzas armadas toman el poder derrocando al Presidente Salvador Allende.

Golpe de Estado de 1973

El 11 de septiembre de 1973 las Fuerzas Armadas y Carabineros realizan un ataque al Palacio de La Moneda , sede del poder ejecutivo; donde se encontraba el Presidente Salvador Allende, líder de la alianza de gobierno «Unidad Popular», integrada entre otros por Socialistas, Radicales, Miristas y Comunistas.

Causas

La situación sociológica dentro del país se observa con una fuerte polarización política. No hay lugar para el diálogo, ni mucho menos para aplicar una política de acuerdos transversales. La situación económica manifiesta una escalada inflacionaria, los precios se triplican en menos de un año y se produce acaparamiento de bienes de consumo diario (cereales, azúcar, conservas, etc).  Y un sector de las fuerzas armadas tiene una preparación ideológica contraria al régimen de tendencia comunista que gobierna al país., son los oficiales que han sido entrenados en la Escuela de las Américas por Estados Unidos.

Los hechos del golpe de estado.

En la madrugada del 11 de septiembre de 1973 las informaciones provenientes desde Valparaíso respecto a una sublevación de la Armada alertaron al Presidente Salvador Allende Gossens, que rápidamente se movilizó al Palacio de gobierno. En ese lugar tres instituciones cuidaban la seguridad del lugar: la Guardia de Palacio de Carabineros de Chile (que se reforzó trayendo municiones extras), Policía de Investigaciones y el Grupo de Amigos Personales (una servicio de seguridad creado en 1970 para la protección cotidiana del Presidente). Ellos debían hacer frente a unos tres mil soldados del Ejército (la mayoría conscriptos que hacían el servicio militar) y unos pocos tanques, con serios problemas de mantención debido a la escasez de recursos para la compra de repuestos (de hecho no podían usar su cañón  principal).

Primero hubo una etapa de persuasión, que se expresa a través de la declaración de la Junta de Gobierno Militar establecida por el General del Aire Gustavo Leigh Guzmán, el General de Ejército Augusto Pinochet Ugarte, el Almirante José Merino Castro y el General Director de Carabineros César Mendoza Durán (los dos últimos asumieron el mando de sus instituciones el mismo día del golpe de estado). En la declaración se ordena al Presidente «dejar su alto cargo», lo cual no es aceptado por el Presidente Allende. El cambio de mando en Carabineros sorprende a la Guardia de Palacio de La Moneda, que finalmente opta por retirarse sin combatir. Allende los autorizó pero dejando las armas.

El retiro de Carabineros da inicio a una segunda etapa, que podemos llamar del desalojo. Se utilizó la táctica policial para obligar a abandonar el Palacio, ésto es el uso de gases lacrimógenos. Dentro de La Moneda había muy pocas máscaras antigás, sin embargo el Presidente Allende decide mantenerse en el lugar. Ésto queda ratificado en su último discurso por radio, en que además hace una reflexión respecto de lo que ocurre en Chile, y sus esperanzas en el país, diciendo frases tales como  «pagaré con mi vida la lealtad del pueblo» y «más temprano que tarde se abrirán las anchas alamedas por donde camine el hombre libre».

Entonces, como tercera etapa, la batalla comenzó. Desde los edificios altos cercanos se disparaba a los soldados. Los militares usaban sus armas de asalto y cañones sin retroceso. Heridos y muertos iban quedando de ambos bandos. Las Fuerzas Armadas, luego de permitir el retiro de las mujeres que había en el Palacio de La Moneda (solo una de ellas se quedó, la secretaria personal de Allende), inician al mediodía el ataque aéreo. Éste es previamente avisado, por lo que la gente que estaba con Allende se refugia en un subterráneo. El ataque de la Fuerza Aérea lo realizan dos aviones Hawker Hunter, lanzando cohetes perforadores. El incendio de la sede gobierno se descontroló rápidamente. A pesar de lo espectacular del bombardeo nadie murió a consecuencia de este.

En medio del incendio, con un aire irrespirable, el Presidente Allende ordena a sus muy leales hombres retirarse (los policías de Investigaciones y el Grupo de Amigos Personales), lo cual significaba una rendición y la renuncia a su cargo. Se organiza la salida con bandera blanca. Sin embargo, él no se retira, suicidándose en su oficina de trabajo. La muerte de Allende no fue del todo clara en su momento, afirmando mucha gente que había sido asesinado, por lo tanto el rechazo a la acción militar se amplió a sectores incluso contrarios a Allende. Esa misma tarde el Congreso Nacional es cerrado y los partidos políticos entran en receso. La censura previa fue establecida a los medios de prensa, muchos de cuales también dejaron de funcionar.

Consecuencias

El rompimiento del orden constitucional derivó en que tampoco se respetasen las leyes, sobre todo respecto del debido proceso, la igualdad frente a ley y el trato a los detenidos. La vinculación de los golpistas con las ideas anticomunistas de la Escuela de las Américas los llevó a actuar muchas veces sin freno en el trato a las personas de esa tendencia política. Se termina una etapa de la república democrática representativa y se inicia un régimen de gobierno autoritario dictatorial.