El Montaje como Técnica de la Literatura Contemporánea

El montaje está asociado al cine, sin embargo, durando el siglo XX se empezó a utilizar con mucha frecuencia en los cuentos o novelas.

La palabra “montaje” se refiere al proceso en cómo se estructura una película, a partir de un conjunto de secuencias, que se van cohesionando o uniendo para dar como resultado el producto final. Si llevamos este concepto a la literatura, podemos decir que se refiere a un tipo de escritura que tiene como eje una serie de escenas aisladas o no continuas, que poseen valor por sí mismas, fragmentarias y que responden a un objetivo particular e independiente de las demás.

Existen diferentes tipos de montaje, que son semejantes tanto en la industria cinematográfica como en la literatura y éstos son:

  • Montaje Lineal: es cuando los acontecimientos aparecen o se suceden en un orden cronológico, por ende, existe coherencia temporal y se asemeja al tiempo real.
  • Montaje Invertido: es cuando hay una ruptura de la coherencia cronológica, una inversión de los tiempos. Es recurrente la utilización del flashback y el flashforward, que son el retorno al pasado y el viaje hacia el tiempo futuro, respectivamente.
  • Montaje de Choque: es cuando se van sucediendo de modo abrupto y violento los planos de la acción, que busca llamar la atención del lector o del espectador.
  • Montaje Alternado: son los hechos que se suscitan en un mismo espacio y se van generando de un modo alternado.
  • Montaje Paralelo: es cuando los acontecimientos ocurren en espacios y tiempos diferentes, dando pie al simbolismo.
  • Montaje Americano: hay una condensación de días, meses o años, que se produce de manera muy veloz, causando vertiginosidad, ya que el tiempo pasa de un modo muy acelerado.